Meko
2024
Buenos Aires, Argentina
Superficie Construida:
400 m2
Este proyecto residencial nace del deseo de integrar un espacio familiar que promueva la conexión con la naturaleza, y que al mismo tiempo ofrezca confort y funcionalidad. La casa se ubica en una esquina de un barrio cerrado, sobre un amplio lote de 75 x 50 metros. Este entorno natural, enmarcado por árboles añosos, conforma un paisaje que resplandece tanto en verano como en otoño.
Con una superficie cubierta de aproximadamente 280 m2 y 120 m2 de galerías semicubiertas y permeables, la vivienda se desarrolla en una única planta con forma de “L”. Esta disposición no solo define el área del jardín, sino que también articula los espacios interiores, generando vistas cruzadas entre los distintos ambientes.
La estructura descansa sobre una delgada losa de hormigón que se extiende formando la gran “L”, atravesada por un perfil metálico que integra todas las áreas, incluidas las galerías. A la vista, emergen dos volúmenes de hormigón que actúan como cajas, alojando el comedor diario y el playroom, ambos orientados hacia la calle.
La losa presenta tres perforaciones estratégicas que generan patios interiores e integran la naturaleza al espacio habitable: uno con tres abedules visibles desde el living; otro destinado a la zona de tender; y un tercero ubicado sobre la ducha de la piscina, que ofrece una vista directa al cielo y al follaje de los robles.
El diseño del living es uno de los aspectos más destacados de la casa: se presenta apaisado, con amplios ventanales que ofrecen una vista espectacular del jardín. Esta área se integra armoniosamente con el comedor, la cocina y el comedor diario. Sobre este espacio, un techo inclinado se eleva, sostenido por una estructura metálica y lucarnas que no solo aportan una sensación de amplitud, sino que también permiten una abundante entrada de luz natural.
El frente de la vivienda está definido por tabiques de hormigón visto, realizados con encofrado de tablas verticales de 1,2 metros de alto, que se extienden hasta la línea de retiro. Esta solución genera un jardín cedido al entorno, un jardín intermedio entre el muro y la fachada, y un jardín interior que se proyecta hacia el corazón del terreno, promoviendo la circulación de aire y luz.
Se han elegido materiales que dialogan armónicamente con el paisaje: madera de lapacho sin tratar para los revestimientos exteriores, utilizada también en pérgolas, cercos y decks; hormigón visto y hierro pintado de negro en las estructuras expuestas, aportando un contraste contemporáneo. La piscina, revestida en su interior con un material oscuro, funciona como un espejo que refleja los árboles circundantes, evocando la imagen de un lago inmerso en la naturaleza.
La casa se funde con el paisaje, creando un espacio que no solo expresa una identidad arquitectónica precisa, sino que también respeta y realza la belleza del entorno. Su disposición, los materiales seleccionados y el diseño detallado promueven una experiencia de vida integral, en la que cada ambiente se conecta con el exterior, ofreciendo un refugio en armonía con la naturaleza.
Meko
2024
Buenos Aires, Argentina
Superficie Construida:
400 m2
Este proyecto residencial nace del deseo de integrar un espacio familiar que promueva la conexión con la naturaleza, y que al mismo tiempo ofrezca confort y funcionalidad. La casa se ubica en una esquina de un barrio cerrado, sobre un amplio lote de 75 x 50 metros. Este entorno natural, enmarcado por árboles añosos, conforma un paisaje que resplandece tanto en verano como en otoño.
Con una superficie cubierta de aproximadamente 280 m2 y 120 m2 de galerías semicubiertas y permeables, la vivienda se desarrolla en una única planta con forma de “L”. Esta disposición no solo define el área del jardín, sino que también articula los espacios interiores, generando vistas cruzadas entre los distintos ambientes.
La estructura descansa sobre una delgada losa de hormigón que se extiende formando la gran “L”, atravesada por un perfil metálico que integra todas las áreas, incluidas las galerías. A la vista, emergen dos volúmenes de hormigón que actúan como cajas, alojando el comedor diario y el playroom, ambos orientados hacia la calle.
La losa presenta tres perforaciones estratégicas que generan patios interiores e integran la naturaleza al espacio habitable: uno con tres abedules visibles desde el living; otro destinado a la zona de tender; y un tercero ubicado sobre la ducha de la piscina, que ofrece una vista directa al cielo y al follaje de los robles.
El diseño del living es uno de los aspectos más destacados de la casa: se presenta apaisado, con amplios ventanales que ofrecen una vista espectacular del jardín. Esta área se integra armoniosamente con el comedor, la cocina y el comedor diario. Sobre este espacio, un techo inclinado se eleva, sostenido por una estructura metálica y lucarnas que no solo aportan una sensación de amplitud, sino que también permiten una abundante entrada de luz natural.
El frente de la vivienda está definido por tabiques de hormigón visto, realizados con encofrado de tablas verticales de 1,2 metros de alto, que se extienden hasta la línea de retiro. Esta solución genera un jardín cedido al entorno, un jardín intermedio entre el muro y la fachada, y un jardín interior que se proyecta hacia el corazón del terreno, promoviendo la circulación de aire y luz.
Se han elegido materiales que dialogan armónicamente con el paisaje: madera de lapacho sin tratar para los revestimientos exteriores, utilizada también en pérgolas, cercos y decks; hormigón visto y hierro pintado de negro en las estructuras expuestas, aportando un contraste contemporáneo. La piscina, revestida en su interior con un material oscuro, funciona como un espejo que refleja los árboles circundantes, evocando la imagen de un lago inmerso en la naturaleza.
La casa se funde con el paisaje, creando un espacio que no solo expresa una identidad arquitectónica precisa, sino que también respeta y realza la belleza del entorno. Su disposición, los materiales seleccionados y el diseño detallado promueven una experiencia de vida integral, en la que cada ambiente se conecta con el exterior, ofreciendo un refugio en armonía con la naturaleza.