Balleneros
2025
Punta Ballena, Uruguay
La casa se encuentra ubicada en un lote único, en primera línea de Punta Ballena, y se desarrolla en tres niveles siguiendo la fuerte pendiente del terreno, finalizando con un remate sobre las rocas, con vista franca al mar y al poniente.
Aprovechando este privilegio, los distintos volúmenes se escalonan en planta y se abren de forma tal que todos los espacios disfrutan de una vista fantástica. Los ambientes principales —como el living en doble altura, la master suite y las galerías— se abren completamente hacia el mar, mientras que hacia la calle la casa se presenta más cerrada, integrándose a la escala existente del entorno.
La arquitectura se expresa a través de grandes planos paralelos, contundentes, de hormigón visto en las cubiertas, que a su vez se perciben livianos por sus proporciones y las transparencias sugerentes que los atraviesan.
El basamento de la casa, a diferencia de la planta baja y la planta alta, está completamente construido en piedra. En el interior, la roca natural del terreno se incorpora como parte del diseño, generando un anclaje con el suelo y aportando una estética única. La piedra se luce especialmente en los patios y visuales interiores que conectan los diferentes niveles mediante huecos y vacíos.
Los materiales acompañan la arquitectura local, buscando una paleta reducida y una expresión neta en su uso. Se destacan la madera de lapacho en fachadas —tanto en revestimientos como en cerramientos—, el hormigón visto con textura de encofrado en tablas en losas y muros perimetrales, y los pisos de piedra natural, que se extienden sin interrupciones desde el interior hacia el exterior, continuando hasta la piscina con borde infinito hacia la bahía.
La vegetación también forma parte integral de la propuesta, resolviendo los remates en los diferentes niveles mediante amplios maceteros perimetrales en planta alta, y acompañando accesos y senderos a lo largo del recorrido. Esta vegetación actúa como un tamiz que brinda privacidad desde el interior y genera una vista más orgánica desde el exterior.
El subsuelo se presenta como una planta libre que alberga una sala de juegos, gimnasio, cava y una vista infinita al mar, lograda gracias al aprovechamiento del desnivel natural. Esto refuerza la idea principal de la casa: una arquitectura que acompaña el terreno, preservando una relación constante entre interior y exterior.
Video Series 1: Balleneros
2025
Punta Ballena, Uruguay
La casa se encuentra ubicada en un lote único, en primera línea de Punta Ballena, y se desarrolla en tres niveles siguiendo la fuerte pendiente del terreno, finalizando con un remate sobre las rocas, con vista franca al mar y al poniente.
Aprovechando este privilegio, los distintos volúmenes se escalonan en planta y se abren de forma tal que todos los espacios disfrutan de una vista fantástica. Los ambientes principales —como el living en doble altura, la master suite y las galerías— se abren completamente hacia el mar, mientras que hacia la calle la casa se presenta más cerrada, integrándose a la escala existente del entorno.
La arquitectura se expresa a través de grandes planos paralelos, contundentes, de hormigón visto en las cubiertas, que a su vez se perciben livianos por sus proporciones y las transparencias sugerentes que los atraviesan.
El basamento de la casa, a diferencia de la planta baja y la planta alta, está completamente construido en piedra. En el interior, la roca natural del terreno se incorpora como parte del diseño, generando un anclaje con el suelo y aportando una estética única. La piedra se luce especialmente en los patios y visuales interiores que conectan los diferentes niveles mediante huecos y vacíos.
Los materiales acompañan la arquitectura local, buscando una paleta reducida y una expresión neta en su uso. Se destacan la madera de lapacho en fachadas —tanto en revestimientos como en cerramientos—, el hormigón visto con textura de encofrado en tablas en losas y muros perimetrales, y los pisos de piedra natural, que se extienden sin interrupciones desde el interior hacia el exterior, continuando hasta la piscina con borde infinito hacia la bahía.
La vegetación también forma parte integral de la propuesta, resolviendo los remates en los diferentes niveles mediante amplios maceteros perimetrales en planta alta, y acompañando accesos y senderos a lo largo del recorrido. Esta vegetación actúa como un tamiz que brinda privacidad desde el interior y genera una vista más orgánica desde el exterior.
El subsuelo se presenta como una planta libre que alberga una sala de juegos, gimnasio, cava y una vista infinita al mar, lograda gracias al aprovechamiento del desnivel natural. Esto refuerza la idea principal de la casa: una arquitectura que acompaña el terreno, preservando una relación constante entre interior y exterior.